Este es mi segundo intento de preparar esta tortas que se venden sobre todo en invierno en los puestos callejeros de Chile.
Se preparan tanto dulces como saladas. Estos deliciosos bocaditos de masa de calabaza frita, acompañados de dulce de leche - manjar- o salsa de chancaca y si es salado con una salsa típica chilena llamada pebre.
Ingredientes:
1 calabaza pequeña- en chile se las conoce como zapallo
8 cucharadas de mantequilla en punto de pomada
5 tazas de harina de uso común
3/4 cucharadita de bicarbonato sódico
1/4 cucharadita de levadura química
1 cucharadita de sal
1 taza de aceite de oliva virgen
1 1/4 tazas de azúcar moreno
1 taza de agua
3 ramitas de canela
2 clavos
zumo de 1 naranja
2 cucharadas de miel
Elaboración:
Cocer la calabaza limpia de piel en un cazo a fuego medio. Cuando esté blanda la retiramos y dejamos enfriar en una fuente.
En un bol mezclamos la harina, el bicarbonato, la levadura y la sal. A continuación agregamos la calabaza y preparamos una masa.
La masa debe estar manejable, ni muy espesa ni muy seca. Pondremos la masa en la mesa previamente enharinada y la trabajamos suavemente.
Dejamos reposar unos 5 minutos.
Y hacemos pequeñas tortitas con la masa de sopaipillas.
Ahora ponemos abundante aceite de oliva virgen a calentar y freimos las tortitas en aceite muy caliente.
Una vez doradas las retiramos en una fuente con papel absorbente.
Mientras vamos friendo las sopaipillas, podemos preparar la salsa de chancaca. Ponemos en un cazo, el azúcar con el agua, las ramitas de canela, la miel y los clavos. Removemos de vez en cuando. Por último añadimos el zumo de la naranja.
Colocamos la sopaipilla y salseamos con la salsa de chancaca.